«Sixtine es una niñita muy pícara de casi 4 años, apasionada por los patos y que, de hecho, ¡afirma ser un pato! Yo soy, por supuesto, la «mamá pata»… Sixtine es portadora de una anomalía cromosómica rara e incluso única que implica un retraso global de desarrollo.»  Hemos interrogado su madre acerca de su planteamiento sobre el aprendizaje por el juego.

«Sixtine empezó a hablar en septiembre de 2009, antes utilizaba solo la lengua de señas, pictogramas y quince palabras. Gracias al lanzamiento de esos medios de comunicación alternativos, pudo comunicar con nosotros de forma bastante eficaz, aún así no conocía demasiadas señas. Desde enero, va a la escuela dos mañanas a la semana y ¡le encanta!»

«Cuando tenía 16 meses, Sixtine llevaba un aparato de verticalización prescrito por su médico de reeducación funcional. Teníamos como indicación ponerla una hora diaria. Hemos tenido que buscar algunas trucos para ocuparla durante ese tiempo, y eso fue un poco el punto de partida. Las actividades propuestas se volvieron las actividades propias reservadas al momento de verticalización para mantener el interés y la motivación de Sixtine. Se volvieron más complejas y orientadas con el tiempo y en función de los progresos.»

¿Qué aprendizajes aborda con el juego?

Intento hacer que todos los aprendizajes sean lo más lúdicos posible, centrándome en los intereses de Sixtine. Para aprender a cortar con tijeras, Sixtine recorta imágenes de sus personajes favoritos, que son los duplos, los pone a pasear en laberintos o a que se asomen en las paredes para aprender las posiciones en el espacio, hemos dado de comer a los patos para las primeras nociones de cantidades, etc.

Es indispensable para mí proceder de este modo para mantener a Sixtine motivada, porque tiene que hacer muchos esfuerzos para lograr algo que un niño «común» logra con toda naturalidad. Para las matemáticas, he pensado mucho en la forma de abordar los números con Sixtine, hemos jugado con la ayuda de diferentes soportes para manipular los tamaños, las cantidades (un poco, mucho, uno solo, ninguno, etc). Luego, para iniciarla a las tres primeras cifras, me inspiré del método de Rémi Brissiaud (1) («Primeros pasos hacia las matemáticas») y he creado un juego que le encanta a Sixtine: «Hago la compra».

En lo que concierne el lenguaje, los libros (que adora) han sido y siguen siendo uno de los principales soportes para aumentar su comprensión y su vocabulario. He fabricado para Sixtine libritos comentados por pictogramas que le permitieron familiarizarse con la sintaxis antes de empezar a hablar, puede ahora leer esos libros formulando frases que todavía no es capaz de pronunciar espontáneamente.»

¿Se pueden integrar estos aprendizajes en un método de trabajo de profesionales?

«Sixtine tiene un seguimiento de fisioterapia desde que tiene 10 meses, estuvo con una logoepda siguiendo el método Padovan(2) desde sus 20 meses hasta noviembre del año pasado y con un profesional de psicomotricidad desde septiembre. Los aprendizajes y las herramientas de comunicación alternativas han sido realizados en casa sin la ayuda de profesionales.»

¿A qué tipo de actividades se muestra Sixtine particularmente receptiva?

«Sixtine es desde siempre muy sensible a la música. Cuando era un bebé, con 6 meses, reía a carcajadas siempre en el mismo pasaje de «la flauta encantada» (CD de Mozart para bebés). Pero ahora prefiere las canciones infantiles y nos acompañan en cada trayecto en coche. Las canciones nos ayudan también en los aprendizajes: cuando Sixtine era más pequeña, tenía puzzles que representaban los animales de la granja, yo le cantaba canciones que estaban relacionadas con cada animal, y eso le ayudaba muchísimo para centrarse en la actividad. O, recientemente, Sixtine tenía muchas dificultades para seguir un trazado con el dedo; cuando introduje canciones para acompañar el ejercicio, ralentizó su gesto y empezó a seguir el trazado estando mucho más cerca de la línea. Y por supuesto, las primeras palabras que pronunció eran en su gran mayoría palabras sacadas de las canciones.

En lo que concierne el tacto, casi todos los aprendizajes se hacen por la manipulación. Sixtine trabaja muy poco de forma «escolar» (fichas, etc) porque además de ser demasiado difícil para ella, me parece que incluso un niño «común» necesita pasar por manipulaciones, así que para Sixtine es incluso imprescindible. Es por este motivo que me estoy formando actualmente en Pedagogía Montessori con la esperanza de que me permitirá acompañarle en los aprendizajes más difíciles utilizando siempre un material concreto que descompone todas las etapas de cada aprendizaje.»

¿El juego siempre se considera como portador de objetivo pedagógico?

«Para Sixtine, está muy claro que en algunos momentos se trabaja, aunque sea de forma lúdica, y en otros se juega. Intentamos trabajar una hora diaria, y de 4 a 6 días por semana según los periodos. Fuera de esas horas, Sixtine juega libremente. En su habitación no hay juegos llamados «educativos». A Sixtine le encanta jugar a la cocinita, pero ahora sobre todo con sus «Duplos». También  pasa tiempo cada día mirando sus libros, ella solita. Por supuesto también le encanta jugar conmigo a todos esos juegos. Durante esos momentos de juego, no me fijo objetivos pedagógicos aunque aprovecho a menudo para introducir una noción o vocabulario; por ejemplo, hace unos días, le introduje la palabra «ausente» mientras estábamos jugando a la escuela con pequeños personajes. Pero eso sigue siendo más bien informal, y el hecho de trabajar de forma estructurada me permite estar más relajada y aprovechar momentos de juego más espontáneos.»

Su conclusión

«Pienso que no deberíamos de dudar en instaurar una estimulación en casa sea cual sea el tiempo que se pueda consagrar a ella, e incluso si no tenemos la posibilidad de que profesionales nos apoyen. También pienso que los modos de comunicación alternativos deberían de ser una de la primeras herramientas propuestas a un niño con retraso de desarrollo. Por supuesto, es más rápido y más fácil tener apoyo de personas formadas, pero no es imprescindible. Reuven Feuerstein(3) decía: » cualquier persona tiene la capacidad de cambiar, sea cual sea su edad, su discapacidad y la gravedada de esa discapacidad. Los niños diferentes necesitan sencillamente más atención y ganas de involucrarse personalmente». Como él, he decidido que «los cromosomas no tendrían la última palabra»! »

Accede a las ideas, realizaciones y vídeos de la madre de Sixtine en su blog : http://kikilo.canalblog.com

1) Rémi Brissiaud es investigador y pedagogo especialista en aprendizajes numéricos. Recomienda presentar lo que llama «los diálogos fundamentales» en edad de guardería en vez de enseñar el «contar – numeración». Por ejemplo se pide al niño «dame dos fichas; así, uno y uno más» (se señala con los dedos a la misma vez). Ese método favorece la comprensión del número.

2) El método Padovan es un método de reorganización neurofuncional que incluye ejercicios que retoman todas las etapas del desarrollo desde el nacimiento: los movimientos motores (rodar, reptar, etc), movimientos relacionados con las funciones de la boca (respiración, masticación, succión, deglución, movimientos de los ojos y de las manos). Los ejercicios se realizan al ritmo de poemas y de canciones infantiles. Estos ejercicios se apoyan en la plasticidad neuronal y tienen por propósito «reorganizar» el sistema nervioso central.

3) El profesor Reuven Feuerstein es un psicólogo y pedagogo israelita que desarrolló herramientas pedagógicas específicas: un método de evaluación y un programa educativo que permite el desarrollo de las funciones cognitivas. En su instituto, en Jerusalen, desarrolló un programa de intervención precoz para el seguimiento de los bebés con trisonomía desde su nacimiento.

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